26 de Mayo

    Se desnuda el alma y con ella se viste de don al prójimo, desconocido en tantas maneras pero tan cercano y sabido siempre ahí… presencia casi habitual en nuestras más humildes rutinas y en nuestros tan distantes mundos, que aun sin darnos cuenta son los mismos que comparten nuestros pies… nuestras miradas… alimento de emociones que despiertan las personas que de un modo anónimo forman parte de nuestras vidas durante siglos, por que sin verlos siempre estuvieron ahí, y lo siguen estando y estarán… y nosotros con ellos… compartiendo este tan extraño lugar que nos habita y no sabemos acoger… quizá por que nos quede grande… seguramente por ignorancia… pero que aún, tras su dulce manto, protege tesoros que por suerte pasaron inadvertidos a los ojos de los más, para así, preservarse del corrupto de la raza que gobierna… tesoros que lo son por el inmenso de su humildad y transparencia, lo simple de su natural movimiento… por el abrigo de su cercana palabra… calida sensación la que comparte sin saber hasta que punto es importante su presencia… equilibrio… emoción de sentirte especial tras su paso… saborear la sonrisa que nos nace ante su rostro… ignorante de su poder… de su fuerza… de su universo… de lo importante de sus gestos que siempre se acompañan de la más de las verdades… de las más inocentes brisas del cariño… del tierno de lo que transmiten… 

… 

   …Y ante ellos, no cabe más que desnudarse y rendirse ante sus pies… ante todos de sus presentes… dejarse abierto y regalarse como uno es, que ya el miedo quedó lejos del momento, que no caben turbias confusiones ante tales acontecimientos… que nada es más grande que las emociones que uno se lleva y guarda consigo como parte de su ser, de su hoy… de su siempre… … …emociones que invitan a reflexionar y empujan a crecer tras sentir que tanto le queda a uno por aprender y tanto hay aun por deshacerse… 




   

   A todos los que tanto me enseñan sin darte cuenta, gracias por estar ahí…










   La pasada noche fue una noche llena de emociones, como tantas otras de las que se comparten con los amigos que hacen de esta, una mágica vida por momentos, de la que uno tiene el privilegio de compartir, pero además, hubo alguien que la hizo aún más especial si cabe sin darse cuenta, sin pretenderlo ni intentarlo… alguien que destapo su corazón y me lo enseñó, y con ello, sentí la importancia de haber tocado con las manos ese momento que para mi fue tan especial… 



    Feliz fin de semana a todos.