…que tan difícil cadencia portan tan aparentemente sencillas palabras… que se puede estar demasiado, y por ello, por su mucho empeño en estar, olvidarnos de ser… olvidar que siendo siempre estamos, aun a nuestro pesar… o el de nuestro alrededor… que las crudas comitivas, a falta de alimentarnos en nuestra búsqueda del tranquilo sabor que acompaña la confianza, cargan el cercano espacio de teatro.. y nos protegen, como tantas otras veces, nuestros sabios adentros, que no saben de palabras ni colores… de sonidos… pero sienten, por que siempre están… y sintiendo nos protegen… nos dejan estar, y prescindir ser, en manera natural, sabio equilibrio el que nos toca encontrar… por que no nos sale, por que no nos crece… se nos sueltan las ganas de dejarnos abiertos al color que no brilla por si solo, al color que se nos ofrece en turbio lienzo de falso momento… nos cerramos, y cerramos nuestro más preciado presente, nuestro “ser”… con el que somos… si queremos… estamos, sin ser, que siendo siempre estamos, pero muchos de esos tiempos, sin querer, que nada nos invita, nada nos acoge ni nos motiva, y nada de malo hay, que cada aire libre es, de tirar pa donde quiera y como quiera, que gran espacio queda, para todos a la vez, para estar y poder ser… y estar… seguir caminando y encontrarnos bienhallados para estar y ser en la más generosa armonía, que es y está por si sola, sin empujarla… sin buscarla… se siente, está y es… nos defiende… nos asila… florece como la misma vida, la que salé por que sí y nos abraza…nos admite tal cual somos y nos deja estar… nos acompaña… fiel compañera que deja nuestra suerte nos haga justicia sin más juicio ni juez que el tiempo, que siempre acompaña tal donde estemos y seamos… y así vivimos, mas siendo que estando…
Feliz ser y estar a todos, siempre!