Civilizados...

    Un tortazo a tiempo evita males mayores... ...Cuantas veces me encuentro ante tal disparatada conclusión, y curiosamente, cuantas mas veces me encuentro ante ella, mas me alejo de entenderla... incluso de intentar entenderla... Nunca he entendido la violencia como solución, nunca la he visto como alternativa, y nunca la he sentido como una opción... Mucho mas beneficiosa para el que la utiliza que para el que la recibe, y sobre todo, acción que dista mucho del aprendizaje... como siempre,  mas de lo mismo... mas de autoridades impuestas por que sí, de mediocres remedios de gente incapaz de autocontrolarse, solución de herederos de los que gobernaban en nombre de dios, la biblia y la ley... valiente ley...  ¿Como se enseña a no pegar con un golpe?... ¿Donde esta el atractivo en una buena hostia?... ¿Donde esta la diferencia entre el tortazo a un hombre, una mujer o un niño?... Todas desde el mas bajo principio de autoridad, lejos de encontrar el respeto ajeno... que no miedo... lejos de ser justa... inocente...  merecida?... justificada?... ... Quizás guardemos tanto odio en nuestro interior que no encontremos otra forma de desahogo, de descanso, de relajarnos... pero... no somos los humanos seres racionales?... y donde esta la racionalidad cuando descargamos nuestra ira en un golpe?... donde esta la racionalidad cuando escupimos palabras malsonantes con alguien que esta aprendiendo?... o a alguien que nos tiene como ejemplo?... Que mal nos sentimos cuando nos pagan con esta moneda... pero como reconforta cuando somos los que le damos rienda suelta a nuestros mas absurdos instintos... y que bien se siente uno cuando ya dejó todo su saber marcado en la piel de alguien... o cuando las palabras van tan cargadas de malquerencias, que levantan la autoestima de quien intenta herir, para enseñar... para enseñar... curiosa paradoja... ... Que tal vez, son el fruto de carencias del pasado... de modos educativos obsoletos, cuando no distábamos tanto de la vida salvaje y sin formación... y que, lamentablemente, nos cuesta despegarnos de ellos... dejarlos a un lado para intentar superarnos y ser mas inteligentes que ellos... ser mas inteligentes que los incontrolables impulsos de hacer daño, de marcar huella... por supuesto, amparándonos en la idea de que lo hacemos por el bien del humillado, del herido, del despreciado... querido?... que gran justa raza somos... que gran ego poseemos... que tan perdidos estamos, que por no saber, no sabemos donde vamos...