...idas y venidas en cada uno de mis dias... trocitos de sensaciones que han topado conmigo y, de algun modo, han dejado alguna huella importante en mi... nada personal con nadie, solo un puñado de ideas y opiniones, dejadas en este saco de retales...

domingo, 9 de mayo de 2010

...donde nos... perdimos?


Al instante, justo un segundo después, se hace un silencio... la primera, siempre inesperada, la que encoge el corazón, la que hace olvidar todo alrededor, la que aísla al presente de todo lo demás... no hay nada, ni nadie, solo el estado en el que te deja, el calor que la acompaña, que no cálido, mas bien abrasador, se hace dueño del rostro, marcado por el perfil inesperado de la palma de la mano... la rapidez con la que todo se siente hace perder el control, sin saber que pensar, que decir, que hacer... solo intentando asimilar que ha pasado, que ha enturbiado el momento, quien a puesto tal fiera incontrolable ante de mi, donde estaba mi acompañante, quien me mimaba hasta este momento, quien fue mi cómplice hasta hace tan solo un segundo, quien fue mi maestro... no importa... ha desaparecido, y tengo ante mi un rostro que desconozco, quizás es el, pero... ahora esta tan lejos, que apenas se quien es...... que ha pasado?... quizás la primera vez fue la que abrió una caja, una trampa, mortal en muchos casos, y quizás, fue la única en la que se pudo tener un rayo de esperanza para que todo cambiase, afrontándola como lo que es... un acto imperdonable, incomprensible, cobarde y miserable, que necesita de toda la fuerza en nuestro interior para borrarla y no dejar que se presente de nuevo... El amor, tan grata emoción que llega a cegarnos ante lo que tenemos delante, se convierte en nuestro verdugo, en nuestra celda y nuestro dolor... cambiando las perspectivas de todo cuanto nos rodea... muchas veces para bien, y otras... ... que locura, que locura crea en nuestros adentros que no vemos mas de lo que queremos, que no nos importa una hostia, que incluso llegamos a pensar que merecemos, que tiene parte de razón... que los insultos ya nos vienen por que si, por que ya son nuestros, forman parte de nuestros días en tal grado que ya, nos pesan como para no poder sentirnos mejor que ellos... y nos hunden, nos encierran... y aun estando fuera, ni vemos ni nos ven, por que estamos tan por debajo que es imposible respirar... nos ahogamos, y solo cuando estamos ahogándonos, nos damos cuenta de quien nos oprime... el amor, el amor que ya quedo tan lejos que ni recordamos como éramos cuando sonreíamos, el amor que nos hacia sentir niños, y con ello, inocencia, por que todo era luz... no habían sombras... la vida nos llenaba de vida, ponía brillo en nuestros ojos y fuerza en nuestras manos para aliviar el dolor de nuestro cómplice, del culpable de sentir tanta vida... tanta vida... que ahora, tanto odio, y con el, tanto dolor... ... Si solo encontrase un rayo de esperanza, un rayo de luz entre tanta sombra, me aferraría a el para que me envolviera y me ayudase a salir... un rayo que fuese tan fuerte y constante que entendiese mis debilidades y con ellas entendiera la manera de hacerme salir de aquí... entender, que entre tanta sombra es fácil perderse de nuevo, y caer... y caer... y caer aun mas adentro, con mas difícil salida, pero no sin ganas, aunque estas, parezcan perdidas, y tenga que empujarlas de nuevo para ayudarme... Un rayo, que buscase en mis entrañas lo mejor de mi, y lo sacara, y lo pusiese enfrente, de mi, de mis tristes ojos, de mis tristes pensamientos, de mis tristes sensaciones, para hacerme ver lo que fui, todo lo que me queda por dar, todo lo que dí...que ya lejos quedaron los días de intentar no mirar, para intentar no ver, y con ello, hacer ver, que nada pasaba, que nada paso... ...ya estábamos dentro... Un rayo que abriese mi memoria, y me hiciese sonreír de nuevo, y sentirme guapa, como era, y como soy, y sentirme viva, llena de vida, y sentir que nada ni nadie hay por encima de mí... un rayo que abriese mi memoria, y sacase de allí todo cuanto me rodea, que no quiero este presente que me tiene encarcelada, que no quiero este olor a rancio a mi alrededor, olor a dejadez, olor a olvido, a viejo... a muerto... por que ya nada de vida queda ante a mi, mas que la poca que me empuja a respirar y seguir... Un rayo que me empuje a salir...



2 comentarios:

Felipe Postigo dijo...

Terrible reflexión Kata. Espero que encuentres pronto la salida.
Un abrazo y suerte.

Kata dijo...

Hola Felipe... por suerte no es mi caso.. es solo una reflexión sobre tantas y tantas mujeres en esa cruel situacion...

Un abrazo.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...